En 2011, la Organización Internacional de Normalización (ISO) estableció una nueva clase de calidad del aire para los fabricantes de productos farmacéuticos en la que se fijaban los estándares de calidad más elevados. La Clase 0 es la calidad del aire más exigente y limita la contaminación en forma de líquido, aerosol y vapor.
Las tecnologías utilizadas para producir el aire comprimido exento de aceite de la clase 0 de Ingersoll Rand ayudan a los fabricantes de productos farmacéuticos a cumplir esta normativa asegurándose de que sus procesos de producción garanticen la ausencia total de contaminantes generados por el compresor.
Ingersoll Rand también ofrece sus soluciones de alquiler a largo plazo, los paquetes CARE y toda una serie de auditorías del sistema de aire comprimido que garantizan el cumplimento de los requisitos de las normas de correcta fabricación (GMP, por sus siglas en inglés) y de las iniciativas de la tecnología analítica de procesos (PAT, por sus siglas en inglés). Por su parte, nuestra innovadora herramienta IntelliSurvey nos permite realizar un seguimiento del rendimiento actual de su sistema de aire y analizarlo para identificar las soluciones más idóneas para potenciar su eficiencia y su fiabilidad.
Nuestros más de 145 años de experiencia nos permitirán ayudarle a mejorar la fiabilidad y el tiempo de funcionamiento de su sistema con los niveles más elevados de eficiencia, unos riesgos minimizados y una reducción de los desperdicios, así como a cumplir sus objetivos en materia de sostenibilidad.
Ingersoll Rand trabajó recientemente con el cliente, que a través de sus subsidiarias desarrolla, fabrica y comercializa productos que salvan y sostienen la vida de personas con hemofilia, trastornos inmunológicos, enfermedades infecciosas, enfermedades renales, traumatismos y otras afecciones médicas crónicas y agudas.
Lea nuestro caso de estudio aquí
Ingersoll Rand trabajó recientemente con el cliente, que a través de sus subsidiarias desarrolla, fabrica y comercializa productos que salvan y sostienen la vida de personas con hemofilia, trastornos inmunológicos, enfermedades infecciosas, enfermedades renales, traumatismos y otras afecciones médicas crónicas y agudas.
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